Aplíquese la crema directamente sobre las yemas de los dedos y extiéndala sobre la zona que necesita
tratar en cualquier momento y lugar, siempre que lo necesite. Evítese el contacto con los ojos.
Esta versión sin perfume del clásico y legendario bálsamo reparador hace maravillas en la piel, ya que permite protegerla e hidratarla en cualquier momento y lugar que elija. Da forma a las cejas, devuelve la luminosidad a la piel, suaviza las manos secas y repara las cutículas y las uñas. También repara los daños ocasionados por quemaduras leves, quemaduras a causa de la exposición solar o el viento, rozaduras o abrasiones que provocan que la piel se agriete, se descame, y ayuda a revitalizar los labios cuarteados